Defensa anuncia diez medidas para dar respuesta a la crisis
Y, de pronto, el emblemático barrio, símbolo de la modernidad, faro del capitalismo triunfante, vaciló a su vez. El Covid-19 había estado ahí, con su corolario, el teletrabajo, que alguna vez fue el motivo favorito de los jefes de departamento, se ha convertido en la panacea para los gerentes de bienes raíces corporativos. La crisis climática se aceleraba. Se rastreó la más mínima emisión de carbono. Los años de celebración del hormigón, el vidrio y el acero se estaban desvaneciendo. Tuvimos que adaptarnos, y rápido.
Si solo quedara uno, sería él, el distrito de negocios de La Défense, al oeste de París, en Hauts-de-Seine, siempre han asegurado los inversores, con los ojos puestos en las cifras de 2021 y 2022. Pero teníamos que enfrentar los hechos, la crisis climática, la crisis energética, la desaceleración económica que estaba poniendo patas arriba al mundo no escatiman el primer puesto europeo, admitió Pierre-Yves Guice, director general del establecimiento público de París La Défense. Y las soluciones del pasado (liberar metros cuadrados, pedir ayuda al Estado) ya no eran posibles.
Reconocer la capacidad del mundo financiero para movilizarse cuando sus activos se ven amenazados. A finales de diciembre de 2022, buena parte del ecosistema inmobiliario terciario de La Défense (promotores, inmobiliarias, arquitectos, urbanistas) se reunió en un anfiteatro y se dieron seis meses para formular propuestas para poner en marcha rápidamente el ahorro. su bosque vertical.
mercado de dos velocidades
“Estamos llegando a una fase de desarrollo donde ya no hay suelo, y quizás demasiadas oficinas, dadas las condiciones del mercado”, comenzó Pierre-Yves Guice, cuando se disponía a cerrar, a finales de junio, los Estados Generales de la transformación de las torres. A principios de 2023, la tasa de vacantes aumentó al 15% para el distrito. Es cierto que la entrega casi simultánea de nuevas torres ha aumentado el espacio disponible. Pero empieza a afianzarse un mercado terciario a dos velocidades: por un lado, los suelos más modernos, limpios o reestructurados, por otro, los edificios envejecidos. El estamento público estima que un millón de metros cuadrados, o la cuarta parte del parque, presenta riesgo de obsolescencia técnica y energética.
Muchas ideas surgieron durante los talleres que reunieron a cerca de 800 actores, aseguran los organizadores. Pero se optó por retener sólo diez medidas que razonan en ley constante; pedir una ley excepcional o millones de euros que ya no están a tono con los tiempos. Y, sobre todo, se establecía un contrato moral: en adelante, la renovación, y no la demolición, sería la norma, las energías renovables la prioridad, al igual que la «Uso mixto»lo que significa desarrollar algo que no sea de escritorio.
Te queda el 60,75% de este artículo por leer. Lo siguiente es solo para suscriptores.