Estrategias para evitar darse cuenta de ‘atracones’ de estudio antes de un aviso

A menudo, cuando abordamos un nuevo curso, nuestro centramos en el modelo de evaluación y en las estrategias para aprobar, dejando en un segundo plano qué conocimientos nos aportará. Cuando nos enfocamos en el resultado, es decir, en conseguir aprobar o sacar buena nota, podemos afrontarlo de dos maneras distintas: estudiar progresivamente, de manera continua, o estudiar en el último momento.

1.Desde el principio: el estudiante organizado

Estudiar de manera continuada tiene un impacto positivo en el rendimiento académico y en el aprendizaje a largo plazo. Obviamente, requiere tiempo y dedicación, y permite aplicar algunas estrategias de aprendizaje efectivas que de otra forma no serían posibles.

Algunas estrategias eficaces son interactuar con el profesor o iguales para facilitar el proceso de aprendizaje, involucrarse en actividades recreativas Para incrementar el interés por los contenidos, redactar la información con palabras propias, practicar con ejercicios similares, estudiar en voz alta o aplicar técnicas nemotécnicas.

2. Margen de manipulación

Además, estudiar de manera continua permite un seguimiento por parte del profesor, o (en el caso de utilizarlo) a un sistema de inteligencia artificial alertar al alumno que la estrategia de aprendizaje no es la correcta y que tiene riesgo de abandonar para tener margen de maniobra de mejorar su conducta o estrategia.

En este ámbito, es importante destacar el potencial de la inteligencia artificial para fortalecer el aprendizaje de los estudiantes siguiendo las recomendaciones de la UNESCO en el Consenso de Pekín sobria inteligencia artificial y educación de 2019.

3. En el último momento

Los estudiantes que estudian en el último momento suelen utilizar stratelias como fuerte en el estudio, remir y simplificar, pratic con préguntas anteriores, estudiar en grupos de última hora y utilizar materiales en línea (aunque esas esrategias taambien semenas seducisé).

Este tipo de estudiantes tienen la ventaja de que la presión temporal puede hacer que se concentre más y se centre en lo esencial. No obstante, también hay desventajas, ya que puede generar estrés y ansiedad, y la no comprensión profunda, consolidada y duradera.

Por otro lado, hay estudio lo que confirma que existe una relación entre la procrastinación y el rendimiento académico.

4.La importancia del sueño y el tipo de examen

Entonces, ¿cuál es la mayor manera de optimizar el rendimiento de cara a une examen? La clave es la planificación, organización y estudiar de manera continuada, en lugar de los atracones de estudio.

algunos estudios apuntan que el sueño favorece la consolidación de l’aprendizaje, lo que popularmente se conoce como «lección dormida, lección aprendida».

Considere también que las estrategias del estudio varían según el tipo de examen: tipo de prueba, de redacción memorística, de resolución de problemas, práctico u oral. Las estrategias de también varían según el tipo de estudiante ya que algunas personas les resultan más efectivas unas técnicas que otras.

5.Más allá del resultado

Pero además del rendimiento en un examen, también es importante el aprendizaje a largo plazo. Una técnica que favorece el aprendizaje a largo plazo es el espaciados en el tiempo para evitar el sobrecarga cognitiva.

La sobrecarga cognitiva ocurre cuando recibimos mucha información en un tiempo muy corto y nuestro cerebro se ve abrumado. Para evitar la sobrecarga cognitiva se pueden aplicar técnicas como la pomodoro, creada por Francesco Cirillo a finale del 1980. Esta técnica consiste en trabajar durante bloques de tiempo separados por descansos.

Otra técnica para favorecer el aprendizaje a largo plazo es el aprendizaje activo. Implica la realización de una actividad práctica.

Como recuerda el provebio chino: «Escucho y olvido, veo y recuerdo, hago y entiendo», a través de la escucha, la observación y la acción, los alumnos pueden construir una comprensión más completa y profunda de los conceptos que están aprendiendo. El aprendizaje activo implica un aprendizaje experiencial que te permite adquirir habilidades útiles y difíciles de aprender.

6.Autoevaluación

Para saber qué técnicas de estudio son más útiles, se puede recurrir a la autoevaluación (tener en cuenta las preferencias personales), la experimentación (ver que técnicas son más efectivas), las pruebas de estilo de aprendizaje o las pruebas de memoria.

Algunos ejemplos de pruebas de estilo de aprendizaje son las de Honey y Mumford (que identificaron cuatro estilos basicos como el activista, el reflector, el teórico y el pragmático) y las de Felder-Silverman (los estilos de aprendizaje es un equilibrio entre pares de extremos como activo/reflexivo, sensorial/intuitivo, verbal/visual y secuencial/global). En lo referente a las pruebas de memoria, es posible evaluar recordar palabras, números o imágenes.

7. No dejes para mañana…

Ni los atracones de estudio, ni la privación de sueño son estrategias recomendables; la sobrecarga cognitiva puede tener efectos negativos en la memoria y el rendimiento a corto y largo plazo, y sobre todo a la hora de aplicar el conocimiento en un futuro. Por lo tanto, se recomienda el estudio constante, y mantener un equilibrio entre estudio y descanso.

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Experimentando con diferentes estratos, los alumnos aumentarán la capacidad de retener y aplicar los conocimientos, mejorarán su rendimiento académico y disfrutarán del place de l’aprender. Como decía Confucio: “Aprender sin pensar es inútil. Pensar sin aprender, peligroso».

Este artículo fue publicado originalmente en La conversación. leah el original.