Cortes en María de Molina hasta 2026 para instalar diez ascensores en el Metro de Avenida de América
A partir de este lunes, una calle de Madrid inicia unas largas obras que provocarán cortes de tráfico nada menos que hasta 2026. Se trata de María de Molina, frontera entre los distritos de Chamartín y Salamanca, que se verá afectada por una reforma en la vecina estación de Metro de Avenida de América. La Comunidad de Madrid, de la que depende la red, instalará diez ascensores para abrir un nuevo recorrido accesible hasta el suburbano. Los trabajos se dividirán en tres fases: una previa, una primera y una segunda. La primera etapa, entre el 3 de octubre y el 9 de enero de 2024, será la más engorrosa en términos de ocupación de la calzada, según ha informado el Ayuntamiento de Madrid en un comunicado.
Estos diez ascensores conectarán con los andenes de las líneas 4, 6, 7 y 9 de Metro y con el intercambiador de autobuses de avenida de América, además de enlazar con las entradas en ambos extremos de la calle. Para construir la infraestructura, se acometerán unos primeros trabajos de demolición de la mediana la adecuación de las señales de la calzada para habilitar la circulación en ella, así como de los desvíos de los distintos servicios afectados. Es la fase previa, entre el 18 de septiembre y el 2 de octubre.
Los carriles afectados de María de Molina serán los más cercanos a la mediana en ambos sentidos de circulación, de manera que estará ocupado permanentemente el sentido salida y, puntualmente, el sentido de entrada. Asimismo, pueden producirse afectaciones puntuales en algún carril contiguo durante los fines de semana. Dado que las ocupaciones variarán según el avance de los trabajos, el Ayuntamiento de Madrid insta a prestar atención a la señalización y a las indicaciones, en su caso, de los agentes de movilidad y de la Policía Municipal.
En la primera fase, entre el 3 de octubre al 9 de enero de 2024, se realizarán las tareas de alineación de los pozos de pilotes transversales. También se procederá al hormigonado de parte de la calle de María de Molina, el tramo entre Francisco Silvela y Príncipe de Vergara. Durante tres meses, la ocupación de la calzada será permanente: se mantendrán los tres carriles de circulación en sentido entrada a Madrid, pero el sentido salida estará cerrado para el tráfico general, con un único carril bus-taxi.
El Ayuntamiento propone varios itinerarios alternativos. Para los vehículos que circulan por María de Molina en sentido salida: el túnel de María de Molina; el itinerario Serrano, Diego de León, Francisco Silvela; recorrer López de Hoyos hasta Francisco Silvela; o Príncipe de Vergara, Marqués de Salamanca y Ortega y Gasset. Para los vehículos de largo recorrido que circulan por Príncipe de Vergara hacia Francisco Silvela: circular por Príncipe de Vergara y girar por cualquiera de las calles que permiten acceder a Francisco Silvela (José Ortega y Gasset, Juan Bravo o Diego de León).
En la segunda y última fase, entre el 10 de enero de 2024 y el mismo día de 2026, la ocupación permanece en el mismo tramo de María de Molina, aunque afectará a menos carriles. Durante dos años, las ocupaciones «serán permanentes y durante las 24 horas del día», advierten desde el Ayuntamiento. En esta fase, el mismo tramo de María de Molina quedará configurado con tres carriles de entrada a Madrid y dos carriles de salida de la ciudad.
El Ayuntamiento de Madrid recomienda utilizar el transporte público y evitar conducir en vehículo privado por las calles afectadas. Para desplazamientos de largo recorrido, se sugiere la utilización de la M-30 y M-40. El plano de las afecciones está disponible aquí.
